Los transductores y captadores son elementos físicos cuya misión es detectar alguna variable física y convertirla en otra más adecuada para poder medirla o manipularla; de ahí que muchas veces también se les utilice en dispositivos de medida como termómetros, balanzas o manómetros de presión. En realidad, los transductores y los captadores los podríamos integrar en un mismo grupo de elementos denominados sensores, ya que, tanto unos como los otros, son elementos sensibles a alguna magnitud física determinada que provoca una reacción o cambio en otra magnitud del sensor que será más fácil de evaluar o medir.
La diferencia entre un transductor y un captador es su función dentro del sistema de control; así, normalmente, los sensores utilizados en el bloque de realimentación se denominan captadores, mientras que los elementos destinados a acondicionar la señal de mando para convertirla en una señal de referencia válida se denominan transductores.

El transductor tiene la misión de transformar una magnitud de entrada en otra de salida que sea más fácil de procesar.
El captador tiene la misión de captar una determinada información del sistema, para realimentarla. A pesar de su diferente utilidad, la naturaleza de ambos dispositivos es la misma; de hecho su única diferencia está en el lugar en que se colocan en el sistema.